Finalmente el dia 5 de noviembre zarpamos con lo que en el último mes se ha convertido en un hábito; otra despedida, en esta ocasión en el puerto de Premià. Después de estar durante la mañana con amigos, familiares y TV3 zarpamos a las 14:00h con destino Sotogrande y 513 millas por la proa.

Despedida en Premià de Mar

Inicialmente tuvimos una ceñidita abierta, de unos 15-20 nudos la cual nos fue rolando hacia popa y disminuyendo en intensidad. Al día siguiente, nos vimos obligados a poner el motor ya que no teníamos demasiado viento… al inicio! Porque por la noche, una vez superado el cabo de la Nao empezó a subir. Durante la mañana del día 7, mientras la intensidad del viento iba en aumento, se nos rompió un patín de la mayor, que cambiamos sin problema y por la tarde-noche, para estar entretenidos se nos fastidio el enrollador del génova. Más tarde, las rachas de viento alcanzaron los 38 nudos obligándonos a arriar el génova y navegar con el tormentín-reliquia de Nin, más que probado durante su pasada vuelta al mundo (hace 25 años).

Puesta de sol desde el SIKKIM

Orejas de Burro

Dadas las circunstancias y la vocación de marineros, decidimos hacer un alto en Almería. Durante nuestra parada nos dedicamos a descansar, comer, y hacer ver que arreglábamos cuatro cosillas. Como apunte, recomendar el “Mini Bar2 de Almería con caña y rica tapa incluida por el módico precio de 1,50 €.  Además, en Almería, intercambiamos contactos con Quim Carreras y su barco “Bora Bora”, quien también hará la vuelta al mundo en un tiempo parecido al nuestro y con quien ya hemos quedado en los próximos destinos.

De tapas por Almería

La mañana del 9, tras empezar el día comiendo unos buenos bikinis, llenamos los depósitos de agua y repostamos combustible para proseguir hacia Sotogrande con parte tranquilo. Durante el día: motor, lectura y buena comida.

Al amanecer del día siguiente el viento de poniente incrementó en intensidad y decidimos parar el motor e izar las velas. Tras un largo día de ceñida en el que avanzamos 35 millas en 12 horas, llegamos a Sotogrande, donde nos recibieron Luís y Né Solano, quienes nos deleitaron con una espléndida cena en su restaurante Midas, el cual recomendamos encarecidamente… para culminar la noche y contrarrestar el mareo de tierra, nos vimos obligados a visitar varios locales de la Línea de la Concepción, donde alguno siguió haciendo bordos acabando finalmente a la deriva…

De Premià de Mar a Sotogrande

Terminaremos este post comentando un poco el día de hoy, en el cual nuestros anfitriones nos han acompañado a Tarifa, haciendo un alto en el camino y parando en el mirador del estrecho planeando así nuestra siguiente ruta hacia Gran Canaria.

Mañana nos dedicaremos a aprovisionar el barco para disponer de víveres hasta el Caribe, arreglaremos algún que otro desperfecto y planearemos nuestra próxima travesía para salir el próximo martes o miércoles, dependiendo siempre de las condiciones meteorológicas.

El Estrecho es muy estrecho

Adiós Mediterráneo